#JUSTICIAPORLETY

El hecho ocurrió el 29 de mayo de 2016 cuando Lety fue atropellada en la esquina de Córdoba y Bonpland, barrio de Palermo, por Prein, quien iba a bordo de un Fiat Punto, en estado de ebriedad. Pero no fue lo único. el conductor no se detuvo y escapó a toda velocidad hasta que a unas diez cuadras fue detenido por dos efectivos de la Policía Metropolitana. El test de alcoholemia demostraría posteriormente que el joven tenía más del doble de lo permitido. Sin embargo, a las 12 horas fue liberado y dos día después, recibió de vuelta el vehículo. La joven, por entonces de 29 años, fallecería 45 días después luego de ser operada tres veces.

A partir de ahí comenzó una batalla en la judicial de apelaciones, pedido de nulidades y negaciones para evitar que Prein respondiera por la muerte que había ocasionado. El joven fue acusado de homicidio culposo en una causa que estuvo a cargo del fiscal Pablo Recchini.

La defensa presentó un sinfín de estrategias con tal de dilatar el proceso y nunca admitió el hecho. Recurrió a distintas instancias para desestimar la acusación.

Como ocurrió en marzo de 2016, su caso quedó bajo la antigua ley de accidentes de tránsito (la nueva normativa entró en vigencia en diciembre de ese año) y a pesar de haber atropellado en estado de ebriedad y abandonar a la víctima, la máxima pena que le aplicarían es de 5 años y quedaría en suspenso. “Pienso que justicia no se va a hacer nunca porque la vida de mi hija no hay nada que pueda repararla. Lo único que pienso es que esto sirva y se dé a conocer para que tengamos más conciencia vial. Que cambien las leyes. Es verdad que esto es un homicidio culposo. Le van a dar de tres a cinco años y no me parece que sea lo justo para alguien que atropelló, dejó tirada a la víctima y negó toda la situación. Algo que repare, aunque para mí no hay reparación. Pero bueno, que nos repare la sociedad toda esta locura que estamos viviendo. Que esto sea un antecedente de que no se puede hacer cualquier cosa", agregó.