Juan Carlos Girauta: "Los medios convencionales desinforman"

Juan Carlos Girauta: "Algunos de los términos que he escuchado me asustan un poco, ¿verdad? Esto es como una prisión invisible. Estamos construyendo reglas y restricciones que no se alinean en absoluto con los principios de la democracia liberal clásica, ¿cierto?

Las situaciones de emergencia siempre conllevan un peligro adicional, que es la liquidación de las libertades. ¿Por qué atribuir la desinformación a las redes sociales? ¿Qué pasa, acaso un gobierno o los medios de comunicación convencionales no pueden mentir o informar incorrectamente sin intención? El gobierno de España y sus medios públicos, durante una terrible situación de emergencia como la pandemia de COVID, se burlaron de quienes recomendaban el uso de mascarillas o comparaban el virus con una gripe común. ¿Lo hacían porque querían perjudicar a la gente, o porque aún no tenían suficiente información? Sin embargo, utilizaron la burla contra aquellos que tenían razón. Un general de la Guardia Civil reveló en una comparecencia pública en Madrid que estaban persiguiendo las críticas al gobierno en redes sociales. Lo dijo como si fuera lo más normal del mundo.

Cuando menos, es extremadamente ingenuo creer que la censura favorece la veracidad de las noticias solo porque se deja en manos de las autoridades; la libertad no funciona así. No dudo de la buena fe del proponente de esta medida. El problema es que la experiencia nos enseña que los gobiernos han utilizado situaciones de emergencia para aplicar censura y acabar con cualquier forma de disidencia política. Por cierto, es uno de sus recursos habituales.

Por supuesto, en las redes sociales hay innumerables noticias, y algunas son falsas, pero no menos que las difundidas por los medios tradicionales. La diferencia es que las redes sociales se autocorrigen a una velocidad vertiginosa, porque son sistemas altamente complejos y masivos. Esto no ocurre con los medios convencionales, que operan en una sola dirección y no cambian ni corrigen, y mucho menos se autocorrigen, ya que son emisores sin interacción con la audiencia."

El Gobierno de España, liderado por el presidente Pedro Sánchez, propone que los propietarios y directivos de estas plataformas asuman responsabilidad legal por el contenido que se difunde en ellas. Esta medida busca garantizar que las empresas tecnológicas sean conscientes de las consecuencias de la información que circula en sus servicios y tomen medidas para evitar daños a la sociedad. ​

Para supervisar y garantizar la implementación de estas medidas, el Gobierno ha anunciado la creación del Observatorio de Derechos Digitales. Este organismo tendrá la función de monitorear el cumplimiento de las normativas en el ámbito digital y asegurar que los derechos de los ciudadanos estén protegidos en el entorno online.

Estas propuestas han generado debate en la sociedad y entre expertos. Algunos consideran que podrían representar una amenaza a la privacidad y a la libertad de expresión, mientras que otros las ven como necesarias para combatir la desinformación y garantizar un uso responsable de las plataformas digitales.

En resumen, el Gobierno de España está impulsando una serie de medidas para aumentar el control sobre las redes sociales, enfocándose en la eliminación del anonimato, la transparencia algorítmica y la responsabilidad legal de las plataformas, con el fin de proteger (según ellos) los derechos digitales y combatir la desinformación en el entorno online.