Primera Elección Judicial México

México celebra su primera elección judicial: ¿avance democrático o autoritarismo disfrazado?

El pasado domingo 1 de junio, México vivió un hecho sin precedentes: la primera elección judicial en la historia del país. Por primera vez, los ciudadanos acudieron a las urnas para elegir a jueces, magistrados y hasta ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. A simple vista, podría parecer un paso democrático, una apertura inédita del poder judicial a la voluntad popular. Pero tras el espectáculo mediático y los discursos triunfalistas del gobierno, la realidad es mucho más oscura.

La participación ciudadana fue escandalosamente baja. Apenas entre el 12.5% y el 13% del padrón electoral se presentó a votar, lo que representa cerca de 13 millones de mexicanos. Pero lo más impactante no fue solo la abstención, sino el repudio activo: más de 10 millones de votos nulos. Esto no fue un error de papeleta. Fue una declaración política clara. Millones de ciudadanos no reconocieron como legítimo este proceso, ni confiaron en las opciones impuestas en las boletas.

Y con razón. Los formatos de votación eran ininteligibles, cargados de nombres desconocidos y estructuras complejas que confundieron incluso a los más informados. La elección fue más una estrategia de saturación que un ejercicio cívico real. Para colmo, la oposición decidió boicotear el proceso, dejando el camino libre para que Morena, el partido oficialista, se apoderara del Poder Judicial con total impunidad.

¿El resultado? Los nueve candidatos promovidos por Morena fueron “elegidos” para ocupar cargos en la Suprema Corte, incluyendo a Hugo Aguilar Ortiz, quien se perfila como el próximo presidente del máximo tribunal del país. Así, la administración de justicia queda en manos de personas designadas por el partido en el poder, debilitando uno de los pocos contrapesos que aún existían frente al Ejecutivo.

Se eligieron cerca de 880 cargos, desde jueces de distrito hasta magistrados. ¿Quiénes eran los candidatos? ¿Con qué criterios fueron seleccionados? ¿Qué experiencia tenían en el ejercicio de la justicia? Nada de eso importó. Lo que importó fue su obediencia al régimen.

Esta elección no fortalece la democracia. La pervierte. Disfraza de participación un esquema de control total. El mensaje es claro: Morena no busca fortalecer las instituciones, sino someterlas. Y el Poder Judicial, que debería ser independiente y garante de la legalidad, hoy se convierte en un apéndice más del autoritarismo en ascenso.

El oficialismo dice defender la libertad de prensa, el derecho al voto y la igualdad de género. Pero sus acciones contradicen esos ideales cada día. Lo que estamos viendo no es justicia ciudadana. Es la captura del Estado por un grupo político que ya controla el Congreso, el Ejecutivo y ahora la Corte Suprema.

¿A esto le llaman democracia? ¿Elegir a jueces bajo condiciones opacas, sin legitimidad y sin participación ciudadana? El pueblo mexicano merece instituciones sólidas, imparciales y alejadas del partidismo. Lo que hemos recibido es propaganda disfrazada de elección.

¿Tú qué opinas? ¿Este proceso fortalece nuestra democracia o nos acerca a una dictadura de un solo partido? Comparte tu opinión en los comentarios y no dejes de informarte a través de nuestras plataformas. La verdad necesita voces firmes, especialmente cuando el poder quiere silenciarla.

#ElecciónJudicial #México2025 #SupremaCorte #MorenaAutoritaria #JusticiaPolítica #DemocraciaEnRiesgo #BoicotElectoral #HugoAguilarOrtiz #VotoNulo #PoderJudicialCapturado